Gestión de Social Media, claves para el éxito

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En el momento en que muchas empresas y profesionales deciden desarrollar una estrategia en redes sociales, suelen incurrir en el error de generar micro campañas para necesidades concretas, a corto plazo, y esperan conseguir unos resultados inmediatos. Es preciso saber que los resultados derivados de la creación y optimización de una marca atrayente, sólo se consiguen con una labor continuada.

Posicionamiento en las redes. Primeros pasos

El número total de datos que circulan en una empresa es grande, y es fundamental la comunicación entre los diferentes departamentos de la empresa. En un primer momento hay que hablar de comunicación y coordinación entre los miembros de los equipos empresariales, para obtener buenos contenidos y resolver las incidencias que se vayan produciendo. A modo de ejemplo, puede corresponder al área de marketing el desarrollo de campañas de promoción de productos o servicios a través de la red, al mismo tiempo que los empleados del departamento de atención de ventas vayan ofreciendo la mejor respuesta a las dudas, preguntas, e incluso reclamaciones, que lleguen a través de las redes sociales.

En la fase de introducción del aspecto comercial de la compañía en los foros y redes sociales, lo que se conoce como Social Media, es fundamental la adaptación al producto. Para conseguir esta adecuación, hay que conocer el producto o servicio que se va a ofrecer en profundidad. Es preciso obtener respuesta a preguntas como qué se va a vender, qué características tienen los productos y cómo vender en las redes sociales. Además, la estrategia debe atender cuestiones como la definición del público objetivo sobre el producto o servicio, qué competencia hay y cómo obtener un mejor posicionamiento en el sector, cómo innovar, etc.

Los canales de Social Media para una eficaz comunicación y venta

¿Es suficiente con una foto, un vídeo, una entrevista o preguntas a un empleado? Además de elegir en qué redes y foros sociales posicionar la campaña o el contenido del mensaje que se pretende difundir, también hay que definir en qué tono se realizará, en enfoque que se va a dar, qué contenido es el más atractivo, etc. Para un productivo posicionamiento en Social Media, la localización del canal y el método apropiados, pueden marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Además, el contenido tiene que evolucionar, no hay que olvidar que los destinatarios son personas que se mueven, se actualizan, evolucionan en sus gustos y preferencias, etc.

Hasta hace algunos años, la clave de la actividad comercial estaba en el producto. Se trataba de mostrar lo que se quería vender, con sus características e incluso magnificando los beneficios. Pero esta concepción ha cambiado. Ahora el cliente lo es todo. Conseguir su lealtad y fidelidad de cara al futuro es la base de una eficaz estrategia comercial. Por ello, se trata de desarrollar una eficaz marca con el objetivo no sólo en vender, sino que es imprescindible valorar lo que clientes y usuarios opinan, para posteriormente tener la habilidad de interpretarlo correctamente.

Con la recopilación de opiniones y comentarios de los clientes, ex trabajadores de la compañía y usuarios de todo tipo, será posible llegar a conclusiones sobre los motivos de unas cifras de venta elevadas o las razones de una campaña infructuosa, pudiendo establecer las bases de mejoras en futuras actuaciones a llevar a cabo. Para conocer todos estos datos, los canales de Social Media son un instrumento de ilimitado potencial.

Los secretos del éxito en Social Media

• La meta, objetivos. De igual forma que en el comienzo de cualquier proyecto, en Social Media también es preciso fijar una meta de lo que se quiere conseguir, potenciar el posicionamiento de una marca, atraer leads hacia un producto determinado, mejorar la reputación online, etc. La meta debe ser realista y ambiciosa a la vez, y será el motor que guíe en el camino. La justificación que se deriva de una necesidad de actuación es la motivación que se necesita para llevar a buen término los objetivos.

• El usuario 2.0. Atrás han quedado los tiempos de los clientes y usuarios pasivos. Hoy en día la información se transmite de forma fluida y los potenciales contactos comerciales van actualizando su información sobre marcas, empresas, productos y servicios de forma diaria. Es preciso fijar los caracteres y peculiaridades del usuario a quien dirigirse, sus preferencias, hábitos, demandas, horas en que se conectan en las redes, etc. Como decimos, la clave no es hablar de lo maravilloso que es nuestro producto, sino aportar valor sobre lo que ofrecemos, cómo lo hacemos, y saber transmitir una diferenciación de calidad y buen servicio entre nuestros productos y los de la competencia.

• El análisis de los canales de Social Media es decisivo. Todos ellos tienen características propias. No es igual la promoción de la marca en Facebook, que en Twitter, Instagram, LinkedIn, o en Google+. No es preciso estar en todos los canales de difusión social, y en todos a la misma vez. Hay que analizar las diferencias entre estos medios sociales y seleccionar los más idóneos en función de productos y servicios a vender y distribuir, del tipo de público objetivo al que van dirigidas las campañas, etc. A modo de ejemplo, LinkedIn puede ser una excelente opción para la búsqueda de contactos o para el desarrollo de una expansión del negocio, Facebook es un buen canal si se pretende tener el mayor target de posibles clientes, a nivel mundial, para un escaparate de productos de la empresa, Pinterest puede ser la mejor idea, etc.

• Una de las preguntas más importantes a la hora de interactuar con los Social Media es el manejo de los tiempos. ¿Cuál es el momento ideal de publicaciones, cuándo se “llega” a mayor número de usuarios? La planificación de acciones es fundamental. Existen herramientas tecnológicas con las que es posible averiguar en qué horas hay un mayor número de usuarios conectados en la Red Social que hemos elegido, así como estadísticas horarias para el grupo social a quien queremos hacer llegar nuestra publicidad, etc.

Conclusión: el mejor método a usar en Social Media

A pesar de todas las teorías que pueden investigarse, lo más acertado sobre el procedimiento a seguir en los Social Media es sacar las conclusiones adecuadas sobre las distintas experiencias. El aprendizaje y el análisis sobre probados casos de éxito o de fracaso siempre es bueno, pero desde un prisma objetivo, y sabiendo que no todos los supuestos son iguales, ni todas las experiencias trasladables.

Otra de las opciones para la puesta en marcha de una buena estrategia de Social Media es la confianza hacia un verdadero especialista. Hoy en día los llamados perfiles IT están muy demandados, pues son los que disponen del mayor número de recursos para gestionar y optimizar estrategias a través de la red social. Un Community Manager, o un Social Media Strategist son los perfiles digitales que mejor conocen las estrategias de posicionamiento SEO, SEM, de aplicación de marketing y e-commerce, etc.